Mediante la tecnología avanzada de celda cerrada, los liberadores de cobre de emew ofrecen una alternativa rápida, segura y eficiente, a la tecnología convencional de sangrado en la refinación de cobre. Este diseño innovador de celda, mejora el cobre y el control de impurezas sobre una gama de concentraciones, dando como resultado un cátodo de alta calidad, comercializable, a partir del sangrado de la refinación. Con una mejoría en las eficiencias energéticas y operativas, nuestra tecnología ofrece procesos más sencillos y mejores retornos de inversión, además de disminuir el impacto ambiental.
tecnología limpia emew
- Mejor eficiencia operativa, sin lodos en la celda, sin ánodos, mejor control de impurezas y control en el nivel de arsénico
- Cobre puro producido para su venta en el primer paso, aumentando la capacidad del fundidor
- Fuente de ingresos adicional del níquel recuperado del sangrado, como un carbonato de alta pureza
- Mejoría en la salud y seguridad, sin niebla ácida ni generación de gas arsano
- Ahorros de energía del 30 al 70% y menor uso de reactivos
Liberadores convencionales
- Problemas operativos y de seguridad a partir de la formación de lodos dañinos e impurezas fuera de control
- Resultados inconsistentes y costos de operación más elevados con el reciclaje de lodos
- Pérdida de valor del níquel recuperado del sangrado como sulfato de níquel crudo
- Preocupaciones graves de salud y seguridad, a partir de la niebla ácida y la potencial generación de arsano
- Electrólisis con gran consumo de energía, y procesos de cristalización o evaporación con un consumo de ácido más elevado
Dificultad:
Antes de poner en marcha la tecnología emew, la refinería de cobre White Pine usaba ánodos usados para depositar el liberador de cobre con impurezas. Esto exigía de embarque para el reproceso, conduciendo a mayores costos, riesgos de mantenimiento y de seguridad, incluyendo el manejo de materiales cargados de arsénico, niebla ácida y gases tóxicos.
Solución:
En 2007, en la refinería White Pine se instaló un sistema de 720 celdas parare emplazar sus liberadores de cobre. La planta emew opera de un modo totalmente cerrado, que elimina los gases tóxicos y la niebla ácida, sin la necesidad de maniobrar un electrodo pesado. Esta solución dentro de las instalaciones, eliminó además la necesidad de 2 750 toneladas métricas de cátodo liberador para llevar a cabo un viaje redondo de 3 200 km, impulsando en gran medida, la eficiencia, y mejoras ambientales y en las finanzas del capital de trabajo.
Resultado:
El cliente produjo cobre puro de calidad B115 en el primer uso del sistema emew totalmente instalado, con beneficios adicionales en rentabilidad y fomento ambiental:
- Disminución del 85% en el transporte de cátodos impuros
- Disminución del 35% en el consumo de energía por Kg de cobre eliminado
- Aumento del 4% en la producción, con un aumento de $30 millones al año en valor de cobre, que estaba atrapado en el capital de trabajo al transportar los ánodos gastados de regreso al fundidor.